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lunes, 5 de septiembre de 2011

Get service para todos (Buenos tratos arranca de nuevo)

Buenos tratos está de vuelta con todos vosotros y servidor -que es quien lo dirige y coordina-, está encantado de regresar nuevamente tras las vacaciones de verano. Vuelvo con enormes ganas, tras un descanso que necesitaba.

Este mes de septiembre cumplimos cuatro años ininterrumpidos de presencia en internet. Fue en septiembre de 2007 cuando edité la primera entrada. Desde entonces el blog se ha ido especializando naturalmente en unos temas que a mí me apasionan y son a los que me dedico profesionalmente en mi consulta ubicada en Donostia-San Sebastián. La excelente respuesta de todos los que participáis en Buenos tratos me ha ido animando año a año a seguir con los mismos temas, tratando de acercar los conocimientos y mi experiencia en el ámbito de la psicología del apego, del trauma y de la resiliencia. Lo mejor de todo -y no me canso de remarcarlo- es la cantidad de personas que he conocido mediante este magnífico medio de interactuar que es el blog.

Estrenamos un curso nuevo y ello me da pie a que reflexionemos sobre los niños, niñas y adolescentes que han padecido malos tratos, abandono y experiencias subóptimas de apego a partir de un vídeo que circula ya desde hace un tiempo en Youtube y que se titula get service. Uno de los principales escollos con los que nos encontramos en el trabajo con los niños es la manera que tenemos de verlos. Miramos sin leer emocionalmente -de manera empática- sus conductas. Sólo vemos el exterior -el comportamiento manifiesto- que nos lleva a mostrarnos reactivos con ellos en lugar de receptivos. Como al protagonista del vídeo, es necesario que se nos aparezca una persona y nos dé unas gafas en las que ponga get service. Así, cuando veamos que agreden, que no atienden, que se muestran coléricos, pasivos, indiferentes, desilusionados, oposicionistas… no despotriquemos y hagamos lecturas desde el rechazo o el hartazgo.

Me gustaría que nos pusiéramos unas gafas que nos permitieran leer qué existe dentro de ellos para comportarse así. Gafas que nos faciliten el desarrollo de la empatía, gafas que sean capaces de leer emocionalmente su interior. Gafas que, por ejemplo, cuando un niño agreda a otro, nos activen un mensaje que diga: “Sufrió maltrato físico y no sabe resolver sus problemas sin pegar” Gafas que nos transmitan, cuando un adolescente desobedece, lo siguiente: “No tuvo nadie que le enseñara una autoridad cariñosa” Gafas que rotulen, cuando un niño no atiende, una frase que lea lo que le ocurre: “Careció de una figura de apego primaria en la cual aprender a fijar su atención” Y así podría seguir. Y, sobre todo -como le ocurre al protagonista del vídeo cuando sus gafas le dicen que el niño que se comporta mal es porque interiormente piensa: “¿A quién le importo?”-, desearía que nos acercáramos a los niños con actitud de escucha, de diálogo, de apertura, de poner el límite de manera cálida… para que ese niño (el niño o adolescente con el que trabajamos, convivimos, criamos o educamos) sienta que sí le importa a alguien. Cuando sienta que le importa a alguien, apuesto a que su conducta será más positiva. Así pues, get service para todos. Esforcémonos por comprender qué le ocurre a un niño para comportarse del modo en el que lo hace.

Y es que este verano en las distintas formaciones a las que he asistido me he cansado de escuchar que los niños necesitan límites normativos. "Hay que ponerles límites desde el principio" - se dice. Y estoy de acuerdo. Pero casi nadie afirma que el problema que algunos niños y jóvenes tienen con la ética puede hundir sus raíces también en que no han desarrollado vínculos afectivos seguros (los límites normativos no se interiorizan si no hay vinculación afectiva; las normas y el cariño van de la mano y hemos de equilibrar afecto y control) Se escuchan pocas voces que reclamen un cambio en el modelo socio-económico actual (que prima el valor trabajo) y que priva a muchos niños del necesario acompañamiento por parte de sus padres durante las edades clave de sus vidas, que es lo que va creando el vínculo. Como ha dicho el pediatra Carlos González recientemente, no vale lo de estar poco con los niños pero con calidad. Los niños necesitan que les dediquemos tiempo cuantitativamente también, saber que estamos ahí, disponibles. Y si se trata de niños acogidos o adoptados con historias de vida duras a sus espaldas -como una mochila pesada y sufriente- todavía más.

Quiero terminar esta primera entrada haciendo una alusión a lo que hemos vivido este mes de agosto en relación a la recientemente fallecida niña Saray Li (q.e.p.d.) He estado desconectado también de internet para descansar. Pero con lo acontecido con esta niña era éticamente imposible para mí y para muchos permanecer desconectados e indiferentes. La niña estaba gravemente enferma de cáncer y una ola de solidaridad inundó intenet y en concreto Facebook para, primero, hacerle llegar a ella y a su familia nuestro cariño y apoyo emocional y económico (necesitaba costearse un tratamiento para el cual la familia no contaba con suficientes medios económicos) ante esta cruel enfermedad. Y, segundo, consumada la desgracia de su fallecimiento, volver a envolver a los padres con frases y dedicatorias (algunas bellísimas y entrañables) que les ayudaran a sentirse acompañados en unos momentos tan duros. Que unos padres pierdan a una hija es algo muy difícil de elaborar. Pero con ayuda y apoyo lo conseguirán, poco a poco. Desde aquí les envío un fuerte abrazo y les reitero mi disposición para lo que puedan necesitar. Internet, a menudo denostado por sus riesgos, es un maravilloso instrumento que ha movilizado a cientos de personas a apoyar y solidarizarse con la causa de Saray Li. Me he sentido realmente conmovido por la respuesta de las personas. Es uno de esos momentos en los que uno se siente orgulloso de pertenecer a la raza humana. Estoy contento de ser un humano y observar y sentir que podemos dar lo mejor de nosotros (aunque casi siempre se publicite cuando damos lo peor) Espero que los padres se hayan sentido arropados. Y aunque Saray ya no está físicamente con nosotros (pertenece a la eternidad, como un día perteneceremos todos) siempre permanecerá en nuestro recuerdo y latirá en nuestros corazones.

La semana que viene continuaremos con un nuevo tema. Las entradas saldrán (una a la semana) los lunes a las 9,30h. Empezaremos con un tema que me pidió una madre sobre los problemas para separarse que algunos niños adoptados muestran.

Este trimestre promete ser apasionante. Nos centraremos, entre otros, en dos temas principales: (1) Como ya os anuncié, el libro del cual soy co-autor y que se publica la primera semana de noviembre y (2) Aplicaciones prácticas a partir de otro libro que he leído este verano que ha sido una auténtica revelación y que nos va a aportar muchísimo: Mindsight, de nuestro admirado Daniel Siegel.

lunes, 18 de julio de 2011

Despedida hasta septiembre

Buenos tratos se toma un descanso en la época estival. Volveré con todos vosotros y vosotras en septiembre. El día 5 publicaré una nueva entrada sobre los temas que a todos nos apasionan (el apego, el trauma y la resiliencia), con el propósito de continuar orientando y ayudando a los padres y profesionales que trabajan con niños y adolescentes que acarrean sobre sus espaldas la pesada carga del maltrato o que han vivido historias de vida duras. Será un placer retomar el trabajo y la actividad bloguera, pero ahora mi mente necesita un descanso. Y también necesito dedicar tiempo a leer, reflexionar, asistir a cursos… con el fin de poder llevar una formación continua. Porque siempre estamos aprendiendo.

Este curso 2010-11 ha estado pleno de actividad para mí: los niños y adultos que semana a semana –es mi principal actividad laboral- me esperan en la consulta con el fin de trabajar en la terapia para alcanzar cada día mayores cotas de bienestar; las jornadas, charlas y conferencias formativas a las cuales me han invitado, que han sido unas cuantas; mi participación -a nivel de técnico- en un proyecto de protección a la infancia para una administración pública de una provincia de España y, por supuesto, semana a semana, mi cita con todos vosotros y vosotras en este blog. He cumplido con el desafío de publicar todas las semanas una entrada y, por ello, estoy satisfecho. En septiembre me propongo mantener, un curso más (de septiembre a julio 2012), el mismo reto: no faltar ninguna semana y seguir escribiendo sobre estos temas, sobre todo con el propósito de darlos a conocer pues son fundamentales para comprender a los niños adoptados y acogidos; y para cualquiera que haya pasado por situaciones traumáticas en las que el abandono y/o el maltrato han estado presentes. Espero gozar de salud para continuar con esta labor que supone un esfuerzo, sí, pero que me gratifica porque recibo también la felicitación de muchos padres y profesionales que se sienten apoyados y orientados en la difícil tarea educativa. Mi alegría también es grande porque este curso hemos aumentado espectacularmente el número de seguidores de Buenos tratos.

En septiembre –el día 5- volveremos con la energía renovada para proseguir con la misma ilusión y pasión. Sin estos dos componentes, no merece la pena dedicarse a nada. No podría hacer ningún trabajo si no sintiera éso por lo que hago. Creo que, además, se transmite a las personas que te rodean, pues conectan con tu vitalidad y energía ilusionante. Sabemos por Siegel que las relaciones interpersonales ricas emocionalmente -las cuales se sienten: uno se siente sentido por el otro, y a la inversa-, son conexiones hemisferio derecho con hemisferio derecho cerebrales. Esto es vital, sobre todo en un trabajo con personas y, especialmente –al menos para mí-, en psicoterapia.

El otoño próximo lo espero con más ilusión si cabe, pues se publica el libro del cual soy coautor (junto con mi colega y amigo psicólogo Óscar Pérez-Muga) Es la guía para padres adoptivos con hijos con trastornos del apego (aunque se puede aplicar a otras realidades como el acogimiento familiar, residencial…) de la que os he hablado en posts anteriores. Sale a la venta (en libro clásico y en formato digital) la primera semana de noviembre. El libro se presentará oficialmente la última semana de octubre. La concepción, el diseño del guión de la obra, las ideas y su redacción me han tenido también muy entusiasmado –y a la vez ocupado- durante dos años. Pero el libro es ya una realidad a punto de nacer y todos los esfuerzos se han visto coronados por el éxito, pues hemos encontrado una editorial a la que le ha encantado y no ha dudado -desde que vieron el texto- en publicarlo ni un minuto. Una editorial de prestigio, además, por lo que el libro se publicará y distribuirá también por Sudamérica –lo cual me alegra mucho porque por esas bellas tierras hay muchos seguidores del blog- Todavía no puedo decir el título ni la editorial. Desde octubre ya os podré hablar con detalle de todo lo concerniente al libro. Lo que más me ha gustado de todo es que participan los niños y adolescentes con sus dibujos, sus vivencias y sus historias. ¡Hay que ver lo que cuesta escribir un libro! Pero merece mucho la pena. Creo, sinceramente, que os va a gustar y ayudar mucho en la educación de los menores -de vuestros hijos adoptados o niños acogidos-, porque va en la misma línea de lo que aquí tratamos, incluso con aspectos novedosos, muy práctico y lleno de orientaciones. De este libro también se pueden beneficiar profesionales que trabajen en la protección a la infancia (psicólogos, pedagogos, trabajadores sociales, médicos, psiquiatras…) y los profesores también pueden encontrar muchas claves educativas.

Finalizo agradeciéndoos de corazón el apoyo al blog: las aportaciones, las alabanzas, las críticas, las personas que he conocido mediante el mismo y lo que aprendo de ellas día a día… ¡En fin, por todo! Lo mejor que el blog me ha ofrecido es interactuar con las personas y conocerlas. Os deseo un feliz verano: que descanséis, disfrutéis, gocéis… de todo lo bueno que la vida nos ofrece. Acabo de volver de un congreso que sobre psicología clínica se ha celebrado en San Sebastián (en mi ciudad, precisamente) Todavía tengo que trabajar en la consulta, pero después de la primera semana de agosto también bajaremos la persiana de la misma hasta septiembre, Dios mediante.

viernes, 9 de julio de 2010

Hazte socio solidario de Exil

Tal y como se indica en su página web, "la asociación se implantó en Barcelona hace cuatro años como una sede del Centro EXIL de Bruselas que cuenta con más de 25 años de existencia. La finalidad del centro es ofrecer una atención médico-psico-social a inmigrantes víctimas de violación de Derechos Humanos y de tortura que viven en el territorio español, con frecuencia en una situación de discriminación y marginalidad. El Centro EXIL tiene la especificidad de desarrollar un programa destinado a las víctimas directas de persecución, encarcelamiento y tortura, residentes en el estado español y, más particularmente, en Cataluña. Uno de los principios de nuestro trabajo es coordinar a los profesionales y los servicios que se ocupan del sufrimiento de estas personas, para desarrollar una verdadera práctica en redes sociales. Se trata de promover una coordinación más eficaz y coherente entre las diversas instituciones y asociaciones para que las personas sean mejor acogidas y atendidas, con sus sufrimientos, sus potencialidades y sus riquezas humanas, contribuyendo así a una mejor integración en la sociedad y cultura catalana actual y del futuro"

Recientemente, he tenido noticia de que el Centro EXIL nos permite hacernos socios solidarios pudiendo, con una contribución anual (o en otra modalidad y cantidad que se desee) ayudar a que ellos ayuden a niños, niñas, hombres y mujeres afectados por la violencia. Personas severamente traumatizadas, víctimas de lo más dañino que existe: la violencia ejercida por el hombre hacia el propio hombre (Jorge Barudy)

Con este apoyo económico vamos a lograr que estas personas, desorientadas, desamparadas y dañadas puedan transformar su sufrimiento y convertirlo en resiliencia, pues desde EXIL van a coordinar toda una red de apoyo médico y psico-social para lograr entretejer en torno a ellos recursos que les permitan rehacerse: recibir tratamiento psicológico, médico, asesoramiento legal, orientación y apoyo para la integración socio-laboral…

He podido conocer cómo trabaja esta asociación, así como a quienes la dirigen en Barcelona, y he quedado impresionado por su labor humanitaria dentro de un marco de intervención profesional que redunda en el beneficio de los más desfavorecidos socialmente y a quienes creo debemos ayudar.

Por eso, os animo a que os hagáis socios solidarios ingresando una cuota anual de 20€, 60€, 120€ ó 200€, o la cantidad que deseéis en este número de cuenta corriente de LA CAIXA: 2100 3084 83 2200375882
Para más información:
Tel.: 93 238 57 60
Mis felicitaciones y mi reconocimiento a todos los que forman EXIL.

Volveré a publicar un post a la vuelta del Congreso Iberoamericano de Psicología (28 julio), comentándoos este importante evento. Entretanto, felices vacaciones a quienes disfrutéis de ellas.

miércoles, 30 de diciembre de 2009

Mi agradecimiento al terminar el año

Un año más se nos va. Es el momento de hacer balance. Por mi parte, no lo puedo terminar mejor gracias al premio que ha otorgado a este blog el de Adopta Extremadura “por su blog lleno de inteligencia y saber hacer y sobre todo por su dedicación profesional exclusiva a los niños con problemas de conducta, sobre todo los relacionados con el abandono y los malos tratos” Desde aquí mi agradecimiento por esta distinción. Es un estímulo que nos ayuda a seguir adelante.

Quiero cerrar el año con más agradecimientos. Para mí, el más importante: A vosotros/as. Gracias a todos/as los que habitualmente os pasáis por aquí y hacéis realidad, con vuestra participación, que este blog se mantenga con la misma ilusión con la que empezó. Espero y deseo seguir contando con todos/as vosotros/as y por mi parte, espero seguir perseverando en la tarea de publicar, al menos, un post por semana que sea socialmente útil, con variedad de contenidos pero con predilección por los temas que hacen referencia a los malos tratos, el trauma, el apego y la resiliencia.

Por eso, os transmito mis mejores deseos para el próximo año 2010: ¡Feliz Año Nuevo para todos/as!

Y quiero, además, despedir el año brindándoos esta preciosa pieza musical, interpretada por Plácido Domingo, titulada: “No puede ser”, de la Zarzuela “La Tabernera del Puerto”. Me cuenta un amigo que cuando la cantó en Nueva York, en Central Park, el público no escuchaba ni italiano, ni alemán, las dos principales lenguas de la lírica. Era castellano lo que oía, en una preciosa melodía. Dicen que el público se preguntaba: "¿De quién es esta emotiva pieza?" Pues de Pablo Sorozabal, un hombre sencillo, donostiarra, fue socio de la Sociedad Gastronómica Ollagorra, capaz de concebir esta maravilla... Lo sencillo es lo más sublime cuando es capaz de emocionar. La he elegido porque su autor es donostiarra, como yo, por su emotividad y por seleccionar algo que no fuera un villancico o canción de navidad pero que pudiera sintonizar con estas fechas. Plácido Domingo hizo universal al maestro Sorozabal.

Me ha parecido que destila belleza -y transmitir belleza es una de las mejores formas de decir adiós a este 2009- y, por lo tanto, lo mejor que os puedo regalar.

Disfrutadla, es mi pequeño homenaje a todos/as los/as seguidores/as de este blog.

Va por vosotros/as.

La fotografía está cogida del blog de Mariví Romero

jueves, 12 de noviembre de 2009

"Coherencia y sentido común"


Mi amiga y colega Zuriñe me envía por correo electrónico unos vídeos en los que aparece el juez de menores Emilio Calatayud impartiendo una charla.

Este juez es conocido por sus sentencias rehabilitadoras de jóvenes que han delinquido. Medidas que aplaudimos porque lo reparador-rehabilitador siempre educa, al contrario que lo sancionador, que pena o castiga pero no da oportunidades a los jóvenes, en edades cruciales, de poder enderezar el rumbo y rehacer su vida. Condenar a un joven que ha delinquido a sacarse el graduado escolar es una gran idea, y es un ejemplo de tipo de sentencia que este prohombre ha dictado.


Confieso que he escuchado con delectación los dos vídeos en los que este juez da una lección y un repaso respecto a cuál es el origen de los problemas de límites y normas por los que atravesamos actualmente en relación a algunos tipos de adolescentes, y cómo los padres no ejercen la autoridad.


No se puede decir las cosas de una manera tan clara y tan sencilla, y pienso que su diagnóstico y soluciones son de lo más sensatas y necesarias.


Os doy mi opinión, y espero la vuestra con ganas en los comentarios: acierta plenamente. Hemos pasado de padres preconstitucionales a padres postconstitucionales, como él sintetiza genialmente. Los primeros: represivos, intransigentes, autoritarios, duros y escasamente afectivos. Los segundos: indulgentes (cuando no negligentes), de dejar hacer, blandos y afectivamente peterpanescos (si me permitís la expresión) De progenitor distante a colega igualitario.


Y muchas de las noticias que nos invaden respecto a los incidentes en los botellones, la falta de respeto a los profesores, los padres que son agredidos por los hijos, etc. (que no son tan generalizados como los medios de comunicación nos dan a entender pero sí son un fenómeno de nuestro tiempo) son consecuencia de que falta equilibrio, de que hemos perdido el norte, la coherencia y el sentido común, como dice el juez. Necesitamos el punto medio, en él está la virtud, como decían los griegos. Debemos asumir que una sociedad democrática (¡sólo llevamos 25 años de democracia, como dice Emilio Calatayud!, es muy poco) supone que eduquemos en derechos y deberes. Rescatemos la sofrosine, virtud también de los griegos.
Emilio Calatayud. Primera parte:




Emilio Calatayud. Segunda parte:

miércoles, 23 de septiembre de 2009

Agresiones a profesores

Hemos tenido noticia, hace poco, de que 50 docentes vascos denunciaron agresiones físicas y psíquicas el pasado curso escolar. Esto es lamentable y sentimos por lo que están pasando muchos de ellos, fruto de, creo, una vez más, la dejadez que nuestra sociedad hace para ejercer la autoridad y para investir a las personas adecuadas de la misma. Se ha creado un clima social, de una manera lenta e insidiosa, en el que parece haber tomado carta de naturaleza la idea de que el ejercicio de la autoridad es para fastidiar al individuo y coartarle su libertad. Es por ello por lo que muchos jóvenes han crecido en un ambiente familiar indulgente y permisivo en extremo con las normas (estas familias terminan por tener una incapacidad para controlar la conducta de sus hijos) y también en un contexto social igualmente tolerante en este sentido. Donde se transmite por doquier el derecho a la libertad pero se la aparta del sentido de responsabilidad. Un ejemplo significativo: ¿Cómo se puede permitir abortar a una joven de 16 años sin que necesite el permiso de sus padres? No es la cuestión el mostrarse a favor o en contra del aborto, sino el abandono al que se les somete a jóvenes (en una edad crítica) a las cuales les supone un enorme sufrimiento tomar tamaña decisión, aparte de las secuelas psicológicas que les acarrea. ¿Cómo dejarlas sin el respaldo orientador responsable de un adulto? Pero bueno, me estoy desviando mucho del tema que nos ocupa hoy.

Ahora la Comunidad de Madrid se plantea dotar al profesor de la consideración de autoridad pública (aunque hay quienes no están de acuerdo con esta propuesta) porque de este modo tendría más poder y, además, podrían fructificar las denuncias que ponen algunos profesores agredidos en el juzgado. Si esto va ayudar a poner un límite social y legal a estos jóvenes agresores, adelante. Pero con esto sólo no basta. Los padres y todas las instituciones encargadas de la educación de los jóvenes son las que han de educar en otros valores que se traduzcan en otras conductas. Hay que regenerar moralmente la sociedad.

La reflexión que me parece importante es que, no hace muchos años, al profesor se le presuponía la autoridad y nadie se la discutía (para que las normas de convivencia en el mutuo respeto se mantuvieran); ahora esta autoridad se ha desvanecido y el profesor es, para algunos, un bufón a quien, desgraciadamente, se puede vejar y maltratar impunemente. Los padres (algunos de ellos, sin incurrir en el error de sobregeneralizar) han fomentado que el profesor pierda esta autoridad, además del clima social excesivamente permisivo al que ya hemos aludido.

Que el profesor recupere la autoridad no quiere decir que recupere el autoritarismo que le caracterizó en el pasado y que para algunos docentes era carta de naturaleza para maltratar, burlar, humillar y ridiculizar a los alumnos. Hemos pasado del autoritarismo dañino de algunos profesores de antaño al hecho (el otro extremo) de que algunos de éstos carezcan de la autoridad necesaria y beneficiosa para educar.

Que el profesor recupere la autoridad significa que sea capaz de ser un educador al estilo de Sócrates: intachable en lo moral, respetuoso con todos, con una sabiduría que le otorga ascendiente sobre los demás, con refrendo social y habilidoso para hacer crecer y enseñar a los demás mediante el diálogo y la reflexión.

jueves, 17 de enero de 2008

Sobre los propósitos al empezar el año

Es habitual que, al empezar el año, las personas sientan que han de hacer borrón y cuenta nueva y plantearse cambios en las esferas de su vida con las que no están contentos.

“Esta Navidad comeré mucho, pero a partir del día 6 de enero régimen severo”, dicen algunos. “Voy a fumar a tope estas fiestas, luego lo dejo”, dicen otros. “Este año tengo que empezar a estudiar inglés a saco”, otro ejemplo.

El psicólogo Ernesto González de Mendibil se refería a esto muy acertadamente al decir que la vida es un continuo, que no hay que percibirla por etapas. “Cuando me jubile disfrutaré de todo el dinero ahorrado”, es fiarlo muy largo. Disfruta ahora de los momentos que vivas.

Otra cuestión sobre los propósitos al empezar el año es que, si las metas son poco realistas (ponerse un régimen severo puede ser inalcanzable para determinadas personas, por ejemplo), generan frustración y tienen un efecto psicológico negativo.


A este respecto, no puedo dejar de recordar al admirado psicólogo americano Albert Ellis con su terapia racional-emotiva tan saludable para la vida: “No son las circunstancias externas las que nos perturban sino nuestro modo de interpretarlas” Para Albert Ellis tenemos que perseguir metas realistas, con planteamientos basados en creencias racionales (“quiero…”, “me gustaría…”, “preferiría…”) que generen emociones moderadas, huyendo de las creencias irracionales (“Debería…”, “Si no hago esto será terrible”, “Absolutamente…”, “Totalmente…”, “Nunca…”) que son las responsables de causarnos perturbaciones emocionales.

“A principio de año debo de…” ¿Por qué? ¿Dónde está escrito que debería? ¿No sería mejor plantearse la preferencia? ¿No es mejor, acaso, ser flexibles?